El poder es la capacidad de influir o controlar el comportamiento de otros, mientras que la autoridad es el derecho legítimo y aceptado de ejercer ese poder. Esta distinción es fundamental para comprender las dinámicas sociales y políticas.
En el 1.500 Nicolás Maquiavelo escribió una de las obras más realistas sobre el poder. En El Príncipe, aborda cómo conservar el poder desde una perspectiva de la esencia humana y no desde el deber ser. Pero no define ¿Qué es el poder?
El poder puede manifestarse de diversas formas:
1. Coercitivo: basado en la amenaza o intimidación.
2. De recompensa: ofrece beneficios a cambio de obediencia.
3. Legítimo: emana de instituciones o posiciones de autoridad formal.
4. Referente: se basa en conexiones con otros poderosos.
5. Experto: deriva del conocimiento especializado.
6. Informativo: se basa en el control de información valiosa.
La legitimidad del poder se refiere a su aceptación por parte de la sociedad, mientras que la legalidad se relaciona con el cumplimiento de las normas establecidas.
Un poder puede ser legítimo sin ser legal, y viceversa. La legitimidad implica la creencia popular en el valor social de las instituciones y en la capacidad del régimen para mantener esa creencia[1].
En los movimientos populistas, tanto de derecha como de izquierda, el poder se ejerce a menudo sin una autoridad plenamente reconocida.
Estos movimientos tienden a desafiar las instituciones establecidas y a apelar directamente al «pueblo», buscando legitimidad en la voluntad popular más que en las estructuras legales tradicionales[2].
Los líderes populistas suelen presentarse como outsiders que luchan contra un «establishment» corrupto, utilizando un discurso que divide a la sociedad entre «el pueblo» y «la élite».
Este enfoque les permite acumular poder sin necesariamente contar con la autoridad institucional tradicional.
En ambos extremos del espectro político, los movimientos populistas tienden a simplificar problemas complejos, ofrecer soluciones aparentemente sencillas y apelar a las emociones más que a la razón.
Esto les permite ganar apoyo rápidamente, pero también puede llevar a un ejercicio del poder que erosiona las instituciones democráticas y el estado de derecho.
En conclusión, el poder es un fenómeno complejo que va más allá de la mera autoridad formal. Su legitimidad y legalidad son aspectos cruciales que determinan cómo se ejerce y se percibe en la sociedad. En el contexto de los movimientos populistas, el poder a menudo se ejerce de maneras que desafían las concepciones tradicionales de autoridad, lo que plantea importantes cuestiones sobre la naturaleza de la democracia y el liderazgo político en la era moderna.
Referencias:
[1] [PDF] Poder y legitimidad – Dialnet https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/1948024.pdf
[2] Poder sin autoridad, marca de identidad del populismo https://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S1870-00632021000200071&script=sci_arttext
[3] ¿Qué es la Legitimidad? – Concepto, significado y definición https://concepto.de/legitimidad/
[4] Diferencias entre legal y legítimo | Peritos Judiciales GP-Grup https://www.gp-grup.com/peritos-judiciales/peritos-tasadores/diferencias-legal-legitimo/
[5] Diferencia entre poder y autoridad – Diferenciador https://www.diferenciador.com/diferencia-entre-poder-y-autoridad/