“Lamentablemente las agencias de viaje la estamos pasando muy mal, no podemos ir a ningún lado”, reconoció la propietaria de Turismo de Castro, Graciela Romero.
Graficó la situación señalando que en el último año “no hubo absolutamente nada, ninguna venta, ninguna facturación, nada”, y comparó la situación de Formosa con la del resto de las provincias, que a partir de octubre reabrieron sus fronteras y no tuvieron problemas con el turismo y si bien no lo hicieron de manera normal, trabajaron y eso les permitió sobrevivir un poco más”.
“Mientras que en Formosa nadie quería salir porque no sabía cómo podía ser el regreso y tenías que hacer aislamiento de catorce días sin saber dónde” dijo la empresaria.
Romero dijo apoyar las marchas de los comerciantes, “aunque no participe de ellas, porque prefiero estar en la oficina trabajando”, y hizo hincapié en que “yo no quiero un subsidio, yo quiero que me dejen trabajar” y advirtió que todo va a quebrar si se les da subsidios a todos “por lo que lo ideal sería que nos dejaran trabajar a todos, sabiendo a lo que nos estamos ateniendo, porque sabemos que no va a ingresar tanto pero entonces uno se va a tener que acomodar a las circunstancias”.
Finalizó diciendo Graciela Romero: “vamos a tener que aprender a convivir con esto, el virus está y no lo voy a combatir porque esté encerrada en mi casa” y abogó “porque empiece un poco la cordura porque en el resto de la Argentina funciona todo”.
