El abogado Daniel Suizer, uno de los representantes de los 98 aborígenes que cumplen cuarentena en condiciones más que precarias en Bartolomé de las Casas, dijo “no creer en la justicia formoseña, máxime cuando de por medio hay una injerencia del Poder Ejecutivo, como en este caso el Consejo del Covid, lo que me hace dudar de que un juez de la provincia haga cumplir la ley”.
El letrado se manifestó tras informar que presentaron un habeas corpus correctivo en favor de los originarios ante el Juzgado Número 1, del magistrado Rubén Spessot, explicando que es “correctivo porque se le pide al juez que modifique las condiciones en que están alojadas estas personas, ya que es inconcebible y discriminatorio que esté alojados en carpas, en el monte, con 4º grados de calor y expuestos a toda clase de alimañas”.
Por ello, señaló Suizer, “pedí una constatación ´in situ´, es decir invité al doctor Spessot a ir al lugar a constatar, ver, palpar, la realidad, y que nos paremos en el sol, en el monte, que nos piquen los polvorines, así el juez a lo mejor dice sí no están en condiciones dignas para cualquier ser humano”.
La presentación judicial tiene un plazo de 24 horas para ser resuelta por el magistrado y pese a su escepticismo, Suizer se esperanzó en que “sea una oportunidad para la justicia provincial de reivindicarse y demostrar que no es así, que es realmente imparcial, que imparte derechos y defiende a los formoseños”.
